Recientemente leí una publicación que expresa una contundente realidad, la cual quiero mencionar a continuación.
De repente despertamos un día y todo cambio… En Disney se apagó la magia, la muralla china no es tan fuerte, New York si duerme y ningún camino quiere conducir a Roma… Los abrazos y los besos se transformaron en armas peligrosas y la escasez de productos nos demuestran una vez más lo egoísta que somos….
Un virus se corona como dueño del mundo y nos dimos cuenta de nuestra fragilidad.
Lo anterior es una evidencia de los tiempos tan difíciles que vivimos como sociedad, quizás los memes han diluido un poco el caos, trayendo algo de risa; pero no han sido suficientes porque en realidad hay un riesgo invisible que predispone el universo con la muerte.
Ante todo esto podemos evidenciar diferentes puntos de vista. Unos interesantes, otros risibles e incluso muchas cosas por reflexionar.
Este blog no intenta aseverar que el virus fue creado, si hay conspiraciones detrás de esto, si es un tema apocalíptico, lo que realmente me interesa es como siempre dar mi humilde opinión de detalles que no podemos pasar por alto.
¿Amarillismo mediático?
Claramente no es un secreto que los medios siempre juegan un papel determinante ante estos sucesos ya que muchas veces se manejan de forma irresponsable, sin embargo para ser honestos también han sido pedagógicos para orientar a las personas desde sus casas.
¿Amarillismo Pastoral?
Por otro lado está el usar ligeramente la palabra de Dios como “cliché o muletilla” apocalíptica ante los impases de la vida.
Ver oradores que forma facilista solo acuñan en el evangelio como otra “mala noticia o terrorífica”, sumando así otra agonía espantosa al diario vivir.
Reflexionemos…
CRISIS IGUAL A OPORTUNIDAD
Sabemos que el símbolo chino de crisis es igual a oportunidad y esto es justamente lo que como iglesia debemos entender.
No es cuestión de escandalizarnos mediáticamente, ni predicar un evangelio “terrorífico”, pero tampoco podemos caer en una “cómoda cobardía” desaprovechando que como iglesia somos quienes tenemos una luz esperanzadora para la humanidad.
Winston Churchill expreso: “Nunca desperdicies una buena crisis”
Esta es una “buena crisis” para predicar las BUENAS NOTICIAS de salvación.
Quedándote en casa: podrás valorar más los tuyos, amarlos, invertir el tiempo del cual muchas veces te has quejado por no tenerlo, podrás compartir tiempo de calidad agradable donde la compañía, el amor, la diversión y muchas cosas especiales que puede que de manera “obligatoria” hoy puede enseñarte el valor de la familia.
Por supuesto lo más importante el poder fortalecer un altar familiar en casa.
Valorar la iglesia: Sin duda el hacer iglesia en línea ha enseñado lo resiliente y poderosa que ha sido la iglesia, el liderazgo, para sobreponerse a este tipo de crisis mundiales.
Sé que ha sido difícil el no poder operar en un establecimiento físico pero nos confronta de nuevo en que somos nosotros la iglesia misma.
Una vez superada esta crisis es importante examinar la motivación de cada miembro a la hora de adorar a Dios, de codiciar su palabra, de alegrarse el poder compartir en comunidad, festejar esos abrazos que hoy por hoy están prohibidos y sin duda entender que cada vez se comprueba la realidad profética de las escrituras, la única profecía confiable.
Por ultimo un buen regalo dado por Jesús para todos nosotros en este tiempo:
Juan 14: 27 NVT Les dejo un regalo: paz en la mente y en el corazón. Y la paz que yo doy es un regalo que el mundo no puede dar. Así que no se angustien ni tengan miedo.